jueves, 22 de abril de 2010

22 Abril: DÍA DE LA TIERRA




Se nos hace necesario, muchas veces, adjudicar un día concreto para recordar algo que debería tenerse presente cada día: SOMOS CIUDADANOS DE LA TIERRA. Todos nuestros días deberían ser días de la Tierra, de agradecimento a su acogida, sus dones, su perdón por nuestras barrabasadas. Como sólo una MADRE sabe y puede hacer.

Ella no tiene hijos más desagradecidos que nosotros, los que nos llamamos y consideramos raza humana, inteligente, poderosa, civilizada...¿Respecto a quién? ¿A los "otros" habitantes: animales, plantas, rocas, agua, tierra, viento, fuego...?

Lo que ha ocurrido con el volcán islandés, nos hace tener que pararnos a concienciar que ante la Naturaleza y sus manifestaciones de perfección y fuerza ¡no tenemos nada que hacer! Es más, hasta sabemos hacer menos que cualquier animalito...¡Sólo asustarnos y atolondrarnos! Y preocuparnos de las pérdidas económicas y trastornos de los viajeros que deseaban regresar a casa o viajar.

Se abren los aeropuertos y respiramos tranquilos. En todo caso, nos preocupa levemente lo del cambio climático. Otra tremenda confusión: Vale que estemos vilipendiando la Tierra y haciendo "todo lo humanamente posible" por destruirla, pero lo que está sucediendo en el planeta, aparte de malas intenciones ocultas, que no se descartan, es una pura cuestión de Física Cosmogónica, de Astrofísica Galáctica .
Basta con que nuestra estrella -Sol- expulse más llamaradas de lo normal, para que nuestra ionosfera se perturbe, para que nuestros instrumentos electromagnéticos se disloquen o dejen de funcionar, para que se altere la teluria de las capas freáticas y fallas y volcanes y cambién los vientos y la nubes y los mares y las aguas...

No queremos entender que se trata de una mutación a nivel planetario por causas del Sol Central de la galaxia. Una mutación imparable y cíclica, que nos está tocando experimentar en primera línea.
Sin embargo, preferimos no escuchar estos mensajes que nos da la Madre Tierra y nos conformamos con hacer unas cuantas de manifestaciones festivas, breves declaraciones políticas oportunistas, algunas manualidades de niños en el cole o , en algunos lugares que aun conservan el respeto a la Pachamama , las danzas y cantos indígenas que tratan de consolar al planeta, herido gravemente por sus hijos...¿Y después de este día QUÉ? ¿No nos damos cuenta de que los fenómenos de la Naturaleza no van a cesar y nos están indicando que algo ocurre en nuestro planeta?
Nos queda mucho que aprender de los pueblos indígenas y aborígenes. Los pocos que hemos permitido que queden. Hoy me uno a ellos en esta plegaria de BENDICIÓN y AGRADECIMIENTO a LA MADRE TIERRA por TODOS SU DONES. Sus cantos , el latido de sus tambores, es el latido de Gaia y el de mi corazón...

No hay comentarios:

Publicar un comentario