sábado, 8 de agosto de 2015

DEMASIADAS "FECHAS SEÑALADAS"

 


          Ante el gran auge de fechas remarcadas, que ya no solo corresponden a fiestas nacionales o locales y/o celebraciones religiosas o institucionales, sino al juego numerológico de las cifras repetidas...¡No puedo menos que sentir una extraña inquietud-congoja que roza el rechazo!
   
      Hoy "8-8-8", hay un gran movimiento mundial de grupos y asociaciones que, con la aureola y la marca "New Age", intentan reunir a un gran número de personas para meditar y "abrir portales de luz" en lugares "mágicos".
   
        Confieso que ese empeño me parece hartamente peligroso. A muchos niveles. Sobre todo el mental-emocional, que no es el único ni más importante, pero sí el más evidente.
  
      Bien que la excusa es que estamos en unos momentos de especial crudeza en cuanto a guerras y violencia, crisis económicas, desgracias por desastres naturales, atentados, hambre, enfermedades y necesitamos encontrar una salida, mucho consuelo y esperanza y gran valor de superación.
  
       Pero, de algún modo, siempre esperamos que "desde allá arriba" nos solucionen los asuntos que sólo nosotros podemos resolver, comenzando por nosotros mismos. Olvidamos que el cultivo personal en todas nuestras facetas, que son muchas, es fundamental para luego realizar una labor grupal.
  
       Un ejemplo muy querido para mí es el de la orquesta musical. En ella cada músico, en solitario y con tesón, practica y aprende su parte. Luego, cuando todos los músicos ensayan o salen a escena,  primero afinan sus instrumentos todos a una. Y después se dejan llevar dulcemente por la batuta del director.
          Ni que decir tienen que todos están ensayando y tocando la misma sinfonía y que el director conoce cada tramo de la misma y la función de cada instrumento en ella a la perfección.

         ¿Es eso lo que hacemos cuando nos reunimos a meditar o a "trabajar con los canales de luz"? ¿Cada persona del grupo tiene una labor de autocrecimiento consistente y una voluntad de verdadera apertura y cooperación?¿Se logra una sintonía perfecta en las multitudinarias reuniones?

             Y, otro detalle importante...Quien dirige el evento ¿Está en la sintonía acorde con el propósito y los participantes? ¿Dirige o manipula?


            Ahí está el quid de la cuestión.

          A veces los mecanismos de manipulación son tan sutiles que nos dejamos influenciar bajo la apariencia de la más sacrosanta espiritualidad.

           Dudo que sea posible el verdadero progreso si cada ser que participa en él no alcanza el grado de desarrollo adecuado con la conciencia necesaria para ello.

          Se producen entonces verdaderas catástrofes a nivel mental-emocional y, permitidme decir que también astral y kármico. Considerando el Karma como "Acción-Consecuencia" y no como "castigo".

          Si un niño manipula un arma puede herirse o herir  a otros creyendo que es un juguete.

         Y es así como se me representa este asunto de la "numerología programada" y el afán de "abrir canales de luz", "elevar vibraciones" y otras cuantas cosas más que suenan estupendas pero pueden resultar tremebundas.

     Debemos tener en cuenta que, aunque confiamos en fuerza más elevadas por considerarlas más capaces, dichas fuerzas elevadas pueden tener propósitos que se nos escapan, ya que apenas conocemos en qué consiste el entramado ¿Es todo "inmaculadamente luminoso" o hay más...?

        ¿No usamos nosotros mismos el progreso tecnológico y la Ciencia para la guerra y el conflicto de poder o para asuntos que son menos importantes que el Bienestar y la Justicia? ¿Y qué me decís de los impuestos y tasas bancarias? ¿Se usan para mejorar las condiciones de los ciudadanos o para que unos pocos "listos" se den "la vida padre"?

        A otros niveles más sutiles las energías pueden ser tanto o más poderosas, pero no podemos captarlas con nuestros sentidos físicos. Ello no es óbice para que estén y actúen.
      Esas "energías" pueden alimentarse de nuestro miedo, ira o anhelo espiritual ¡Sin que lo sepamos!  Y tampoco sabemos cómo luego estos asuntos son usados.

        Me viene a la mente a este respecto el oscuro tema de las marcas de ropa o tecnología que usan esclavizadamente a sus empleados pagándoles miserias y dejándolos exhaustos para luego hacer ganancias millonarias cobrando al comprador cantidades alucinantes.

          A nivel terrenal en el asunto del "espíritu", las sectas son vivo ejemplo. Y en ellas se han dado tremendos casos de suicidios colectivos o aberrantes abusos sexuales, precisamente usando la parte inocente-ignorante de cada miembro bajo la  hipnótica promesa de "alcanzar el Paraíso".

         Cedemos nuestro poder sin conocer el alcance que tiene ni el estado en el que lo entregamos y el precio que esto conlleva.

         Por mi parte, aunque adoro la Numerología y me encanta jugar con los números, incluso tomo en cuenta los portales y sub-portales...¡ Me niego a hacer de esto un rito-ofrenda-manifestación y menos en grupo!

       Porque hay mucho que cultivar en cada uno de nosotros en solitario y con honestidad antes de lanzarnos a "salvar la Tierra", sin conocer nuestras verdaderas herramientas y tenerlas afinadas y a punto para tal fin.

domingo, 17 de mayo de 2015

PROMESAS


TIEMPO DE "PROMESAS"...¡ELECTORALES!

Promesas...
Es un tiempo donde la ambición de conseguir poder hace prometer a los aspirantes a él las metas más imposibles y espectaculares.
Véase a los políticos llenándose la boca con falaces utopías , en discursos acalorados y fervientes, para que un pueblo desencantado y derrotado caiga en la trampa de confiar en ellos.
Por ahora, la única promesa que me creo es la del propio Sol, que nos da la seguridad de que brillará para nosotros durante un largo tiempo.
 

jueves, 15 de enero de 2015

TECNOLOGÍA, INTELIGENCIA y CONCIENCIA

Asociamos el progreso casi exclusivamente al avance tecnológico, la proliferación de aparatos  y sistemas y su uso por la mayor cantidad de personas en el planeta.
Nos parecen muy inteligentes quienes saben manejarse entre IPhones, tabletas, portátiles de última generación o videojuegos 3D…
Es alucinante ver cómo los niños agarran una tablet o un teléfono móvil con cortos años y lo manipulan como si lo conocieran desde siempre.
Y es como si nuestro avance como humanos estuviera ligado tan solo a estas cuestiones, haciéndonos considerarnos el ombligo del Cosmos por esta proliferación de medios de divertimento, negocios y comunicación.
Se le coloca el apelativo “inteligente” a un coche que aparca solo, a un reloj que sirve de portátil o a un alimento o crema de cosmética que lleva nutrientes y elementos que, nos aseguran, nos ayudan a estar fuertes y sanos y más bellos…
Se le añaden a los alimentos Bífidos, Omega3, Calcio, Oro, Oligoelementos y etc., con el afán de que en un solo sorbo o bocado del producto, nos llenemos  de perfecta energía vital.

Pero por mucho que queramos disfrazar todo esto de avance en la humanidad, para mí y es solo mi opinión –visión del asunto,  es un modo más de embrutecimiento, adicción y delirio irreal.

No veo que se haya desarrollado en igual medida la solidaridad, la compresión, la tolerancia, el respeto a la diversidad, la colaboración, la búsqueda del beneficio común, la paz interior y exterior y, englobando todas estas cualidades, la conciencia.
La conciencia de quienes somos y qué papel tenemos en el planeta y en la vida.

Típico ejemplo es el ver cómo, hasta en los lugares más remotos  y con  inesperados usuarios, se prefiere grabar con el móvil el accidente o atentado que se está presenciando antes que auxiliar o remediar a los que lo sufren. 

Para rematar,  se sube a YouTube y se vuelve viral, porque una morbosa atracción por ser espectadores inanimados pero sorprendidos y  meneados por estos acontecimientos. En plan Circo Romano… ¿verdad?

No parece ir con nosotros. Incluso me atrevo a decir que disfrutamos sádicamente del horrendo espectáculo de sangre derramada, cuerpos destrozados y ejecuciones sumarias. Que los medios de comunicación se encargan de repetir en todos los ángulos, noticias y retransmisiones posibles, curiosamente, dando siempre la misma interpretación o, incluso, anunciando datos erróneos  según se copian unos de otros en dicha información. Porque no parece haber cabida para los reporteros valientes que sí desean contar la verdad de los hechos.










La tecnología sin conciencia y al servicio de una inteligencia selectiva y adicta a creer que todo es virtual y “videojugable” es un peligroso modo de generar guerras, enemistades, enfermedades psicológicas, suicidios y todo tipo de aberraciones y torturas. Por sí misma no nos hace crecer en nuestro ser, solo en algunas y no muy variadas habilidades. Y entre ellas, no nos estabiliza el mundo emocional sino al contrario y nos altera y resetea el campo mental, para que parezcamos más máquinas que seres que sienten, gozan y padecen.

Nuestra mirada se adapta al pequeño diámetro rectangular de una Tablet o un teléfono de la última hornada de las grandes marcas y esto se vuelve nuestro mundo.
Es más importante contestar una llamada o leer un WhatsApp que conversar o estar atentos a lo que estamos haciendo, como es manejar un volante.

Encuentro especialmente hilarante el ver a un ciclista hablando por el móvil mientras pedalea o el que una señora empuje el carro de la compra en el supermercado con el vientre o la cadera mientras trata de contestar el WhatsApp que le acaban de mandar.

Me pregunto si este tipo de progreso no nos está llevando a más desesperación, ignorancia y abulia.
Queremos estar vitales y supremamente energéticos e invertimos nuestro tiempo y atención a algo que nos altera las ondas cerebrales, nos roba horas de sueño, tranquilidad y nos entorpece los pensamientos creativos caleidoscópicos.

Y conste que soy de las que está encantada con la música de sintetizadores y los vídeos 3D. Cualquier cosa que estimule mi imaginación, que abra mi percepción a nuevas perspectivas, que incremente mi curiosidad por saber cómo funciona el mundo y sus seres…¡¡¡Me entusiasma!!!

Sería una gozada que usáramos la tecnología para unir pueblos y caminos, para borrar fronteras y comunicar corazones y sueños. Para viajar verdaderamente a las estrellas y aprender de otras razas y existencias.

El síntoma de que eso puede ser el mejor modo de progreso, lo tendremos cuando cesen las violencias y las desigualdades, cuando todos podamos ser considerados Ciudadanos de la Tierra de Pleno Derecho.

Con todos quiero decir todos los humanos, animales, plantas, elementos y vida entera que estamos asentados en este privilegiado enclave de la Vía Láctea…